sábado, 12 de enero de 2013

8- PIMIENTOS ASADOS

(sencillo y práctico)...

Hola a todos.

El pimiento; fruto del Nuevo Mundo que conquistó el Viejo.

Según datos del año 2009, España es el cuarto productor mundial de pimientos (por detrás de China, Méjico y Turquía) con una producción de más de 1 millón de toneladas de este rico fruto. De este millón, la mitad se cultiva en las provincias de Alicante, Almería y Murcia, en cultivos bajo invernadero que producen todo el año. La variedad más extendida es la "lamuyo" de origen francés (desarrollado por el Instituto Nacional de Investigación Agronímica de Francia -INRA-).

El pimiento rojo maduro es un alimento muy rico en vitamina C (incluso más que los limones y naranjas). Esta vitamina, esencial en nuestra dieta y para nuestro organismo, nos ayuda a absorber el hierro y el calcio y otros nutrientes. Su falta o ausencia provocan debilidad, cabello frágil, encias sangrantes, heridas que no cicatrizan o pérdida de apetito. Es muy interesante comer este fruto en épocas de convalecencia tras haber pasado alguna enfermedad o afección, ya que ayuda a incrementar las defensas. 

Si quieres tener en tu balcón o jardín una planta bonita, aprovecha las semillas que nos da cualquier pimiento (de las semillas de un pimiento pueden salir unas 50 ó 60 plantitas) y disfruta al verla crecer. No necesita ningún cuidado; solo agua y sol. Además no dará alegría ver sus frutos ir creciendo poco a poco, y el éxtasis total cuando nos los comamos.

Un buen acompañante para todo

Cuantas veces nos hemos levantado del sofá y hemos ido al frigorífico para tomar algo de comer y por vaguería nos hemos ido a la cama sin cenar. Imagina varias combinaciones de platos con pimientos asados que nos solucionarán una comida rápida o una cena frugal; bocadillo de atún con pimientos asados, una tortilla francesa con pimentos asados, un huevo frito con pimientos asados, bocadillo de pimientos asados y anchoas, s... y así innumerables combinaciones en las que puedes tirar de "lata" y no complicarte mucho la existencia. También los puedes añadir a una ensalada ó un filete a la plancha con guarnición de pimientos.

La  receta no puede ser más sencilla:

-4 pimientos grandes rojos (o verdes o combinación de ambos).
-sal
-aceite


1-Precalentar el horno a 180º.

2-En un recipiente para horno, disponer los pimientos que anteriormente habremos lavado.

3-Rociar con aceite (si queremos podemos "masajearlos" con el aceite) y echar sal por encima.

4-Meterlos en el horno durante 20/25 minutos ( !ojo! si te pasas de cocción te costará más pelar después los pimientos). Más o menos estarán hechos cuando presenten la mitad de su tamaño anterior. Pensemos que la carne del pimiento se cocina y pierde agua, y por tanto volumen.

5-Una vez que estén hechos, habrá que pelarlos y quitarles las semillas. Es más sencillo pelarlos cuando aún están calientes (o tibios, no hace falta escaldarse las manos).

6-Tras haberlos pelado y limpiado, cortar en tiras, disponer en un bol, colar el liquido resultante de la cocción  y añadir aceite hasta cubrirlos. Probar y rectificar de sal.

7-Si te gusta el ajo, añádele un par de dientes de ajo cortados en láminas; esto les dará un sabor especial. 

En el frigorífico pueden aguantar semanas y tener un bol con unos pimientos asados, nos puede salvar una cena (o una visita sorpresa que viene sin cenar).

A disfrutar

Fuentes:
-Archivo familiar.
-www.infoagro.com
-www.botanicalonline.com
-La cocina y los alimentos (Harold McGee Ed.2007)



No hay comentarios:

Publicar un comentario